UN TREKKING DE ALTURA.

Fotografía para abrir boca , y ver que no era solo un mero paseo. Fantásticas vistas de la cima de Horcados Rojos, Picos de Europa.
Un día de trekking estupendo , que antes de comenzar ni nosotros mismo pensábamos llegar hasta donde llegamos.
Salíamos a eso de las 10:00 de la mañana de Fuente de, ya que tuvimos que esperar una larga cola para coger el telecabina que nos llevaría hasta la cima de el cable desde nos disponíamos a salir.
El día comenzo un poco lluvioso y con mucha niebla , nos fue imposible hacer alguna panorámica desde el mirador de el cable , ya que es impresionante verte colgado en el filo de las rocas a muchos metros de distancia del valle donde comenzamos.
Llevando ya un buen tramo recorrido , teníamos que decidir que ruta escoger ya que había varias opciones. Escogimos la cima de Horcados Rojos, donde comenzábamos nuestra andadura por un camino mas o menos ancho y de fácil ascensión , sin llegar a pensar que aquello se iría endureciendo por momentos, estrechándose y empinándose, por un pequeño sendero si se le puede llamar a ese pedregal, en donde se nos hacia difícil ya andar y donde había partes en las que teníamos que cruzar por la nieve, con alguna dificultad ya que no llevábamos calzado preparado para esta.
Haciendo un esfuerzo mayúsculo, obteníamos nuestra recompensa, llegando casi a gatas , y agarrándonos por unas cuerdas instaladas en la cima, al refugio de Horcados Rojos, unos 1.7oom de altitud creo. Después de un corto y merecido descaso nos dispusimos al no menos duro descenso .
Nos comenzo a lloviznar y nos dolían ya los pinrreles, (pies), puesto que la hazaña no fue muy larga pero si intensa por el esfuerzo , unos 12 o 13 kilómetros recorridos y con un tiempo de mas de 5 horas y media. Todo sin parar, nada mas que en la cima que estuvimos unos 10 minutos por que allí hacia frió y eso que estábamos en pleno agosto.
Regresábamos ya con muchas ganas de descansar y de comer ya que con estas cositas se te habre el apetito .
En definitiva una jornada inolvidable que sin duda volvería a repetir, aquí en Picos de Europa.